
LA BALADA DE ELEAONORA AGUIRRE
          Autor: SANTIAGO GARCÍA TIRADO
          (Narrativa, 97) 
        
 276 páginas  18€
          ISBN: 978-84-15353-30-0 
DESCATALOGADO
 GANADOR DEL V PREMIO IRREVERENTES DE NOVELA 
          
               
          Eleanora Aguirre se confiesa así, a punto de concluir su historia: 
          No necesito nada. Quiero estar aquí un tiempo, conocer gente, 
          vivir esto que está pasando aquí, luego ya veremos. 
          Casi todas sus intenciones se hallan condensadas en esa frase. Bueno, 
          falta un detalle: Conocer a Janis Joplin. En los primeros compases de 
          la novela le ha dicho a una amiga: Si en Monterrey hay gente como 
          esa Janis, no sé qué chingados hago yo en este internado. 
          Aquí no vamos a ver nada del mundo. A una hippie que conocerá 
          más tarde le espeta: Todo eso es una forma de huir. ¿De 
          qué huyen ustedes? 
               
Esta novela es la narración de un viaje.
          Corren los años 70 y México es ancho y ajeno a los ojos 
          de Eleanora Aguirre. Pero no es temible. O no lo suficiente como para 
          agarrotar sus pies. En el camino hay gente diversa y hay ciudades y 
          hay música, en todas partes música: corridos y rock, y 
          rancheras y rhythm & blues. ¿Alguien dijo Joplin? Sí, 
          Joplin también está en el horizonte. La brújula 
          de Eleanora Aguirre se obceca en marcar la dirección hacia Janis 
          Joplin. Eleanora es una muchacha y es una metáfora. Habla de 
          los descreídos, de los que dudan, de los que deciden irse. Es 
          una apología del flâneur. Del inadaptado también, 
          que acaso sean una sola y la misma cosa. En el aire suena Vietnam, y 
          Tlatelolco, y cantan hippies, y otros preparan la revolución. 
          Pero lo que fascina es el camino.
          Esta novela es la narración de un viaje.

 (Linares, 1.967). Se presentó en 2.003, 
          al ganar el premio Teruel con Un fotógrafo en la siesta. Sánchez 
          Dragó calificó de «restallante » su prosa, 
          y Javier Reverte se manifestó sorprendido: «es difícil 
          encontrar un cuento tan redondo». Tras la publicación de 
          su novela Un preso que hablaba de Stanislavski (Ediciones Irreverentes, 
          2006), la crítica afirmó «García Tirado estará 
          seguro entre los grandes». Posteriormente ha publicado el libro 
          de relatos Todas las tardes café (Ediciones Irreverentes, 2010), 
          finalista del Premio Internacional de Relatos Vivendia. La presente 
          obra ha ganado el V Premio Internacional Irreverentes de Novela. Ha 
          participado en las antologías Microantología del microrrelato, 
          Microantología del microrrelato II, Poeficcionario, 13 para el 
          21 e Hiroshima, Truman y es el editor literario de Asesinatos profilácticos. 
          
        
 
    
  







